domingo, 30 de septiembre de 2007

Masturbación sin orgasmo


Cuando recibí esta mañana Su mensaje, con las órdenes para hoy, pensé muy acertadamente cuanto me costaría esta vez cumplirlas. Jamás en mi vida me habia masturbado con la idea de no tener un orgasmo, y francamente no veia la manera de conseguirlo una vez llegado al clímax, puesto que es una respuesta física no controlable. Pero tambien me preguntaba de que manera podria llegar a eyacular sin pensar en Usted, y por supuesto, en ninguna mujer. Era impensable desde mi punto de vista llegar a tener una erección sin ningún tipo de estimulo, así que para cumplir esta primera órden, tenía que conseguir la erección, masturbarme, y llegado el momento del orgasmo, correrme sin pensar en algo placentero. Y así lo he hecho. A pesar de tener la libido tan acumulada, de llevar 4 semanas en castidad, me ha sido complicado llegar al orgasmo, puesto que en cada momento que conseguia llegar a ese punto, este se reprimia al blanquear mi mente. Pero al final lo he conseguido después de varios intentos. He eyaculado sin orgasmo, o por decirlo de otra manera, con una corrida rota, abrupta, sin placer, lanzando el líquido seminal sin tener el placer del orgasmo. Como se puede imaginar Ama, ha sido muy complicado. Y al conseguirlo, me he sentido muy frustrado y humillado. Pese a haber estado en castidad siguiendo Sus órdenes, por primera vez he sentido que mis orgasmos, no me pertenecen. Son Suyos y solo Usted decide como y cuando los gozo. Y eso me hace ser mas Suyo todavia. No he podido evitar que me viniera a la cabeza el pensamiento de que probablmente, a partir de hoy, todos mis orgasmos sean como este. Y he tenido miedo, Ama, aunque por otro lado, siento que hoy he subido un peldaño mas en mi sumisión, un peldaño que es incluso mas complicado que todos los demás, pero por eso mismo, este nuevo nivel me acerca mas a Usted y por ello, aún sintiendome frustrado, me siento feliz por que se que Usted se sentirá feliz, y eso es al fin y al cabo lo que me hace sentir feliz.

Su gusano patético

viernes, 28 de septiembre de 2007

INFORME DE CASTIDAD - CUARTA SEMANA


Esta semana se ha hecho insoportable. Los dolores son intensos, y el deseo es incluso peor que los dolores. Estoy inquieto y nervioso. Practicamente no puedo controlar los pensamientos, y lejos de ser excitantes, son una tortura. Hago lo imposible para quitarmelos de la cabeza, pero vuelven una y otra vez. Siento que me tiraría a Sus pies besandolos con gran pasión para implorarla que me libere de semejante sacrificio. Mi pasión por someterme a Usted llega a ser ilimitada. Muero por complacerla, por verla feliz, por estar a Su lado.

Oh Ama, siento que voy a enloquecer de deseo.
Por favor, no me deje así. Siento que me voy a perder ...

Lo único que me sostiene es que se que para Usted esto es importante, que está disfrutando como nunca, y que merece la pena cualquier sacrificio para verla feliz, Ama.

Su gusano patético

domingo, 16 de septiembre de 2007

INFORME DE CASTIDAD - TERCERA SEMANA




Transcurrida la tercera semana, el deseo se hace mas intenso. Me cuesta controlar los pensamientos. Las erecciones son mas continúas y es cuando pienso en Usted. Los cambios físicos se han hecho más evidentes. Los testículos están más hinchados. Sobre los 20 cm. de contorno. Los dolores son mas intensos. Ya no son leves molestias. Los pinchazos son mas continuos, sobre todo en los conductos y testículos. Hacia el final de semana, cualquier ropa ajustada provoca dolores incómodos. Esto obliga a acomodar los testiculos con las manos cada vez que me siento, o cada vez que los noto demasiado prietos. Una ropa interior más amplia y pantalones de pinzas mejoran la incomodidad.


Me encuentro nervioso, y excitado, y todo el día estoy pensando en Usted. Cada día que no recibo noticias Suyas se hace insoportable. Tengo unos deseos enormes de mostrar mi sumisión hacia Usted. Me vienen temores a la cabeza, como que no pueda soportarlo, o que un sueño húmedo de al traste con el sacrificio. Siento la necesidad de estar a Su lado, de oir Su voz, de ver como se siente satisfecha con mi sacrificio, de sentir Su felicidad ...

Su gusano patético


domingo, 9 de septiembre de 2007

Ideas equivocadas acerca de la Dominación Femenina.

Foto de Werner Amann

Diría que todos los sumisos, cuando llegamos al mundo de la dominación femenina, llegamos con unos planteamientos y unas ideas muy equivocadas. Llegamos pensando que esta es una manera de realizar nuestras fantasias sexuales; que el sexo es el eje fundamental bajo el que se mueve la dominación femenina; buscamos satisfacer nuestros instintos sumisos pidiendo a la mujer que haga o deje de hacer esto o aquello ... Y nos olvidamos del verdadero significado de ser sumiso, y lo que significa ser mujer en una relación Femdom.

Nos olvidamos de que un sumiso está para servir a la mujer. Nos olvidamos que el castigo no es algo placentero. Nos olvidamos que si queremos algo, deberemos conseguirlo como premio al esfuerzo y entrega. Nos olvidamos, que el placer de la mujer va mucho mas allá del sexo, y por supuesto, mucho mas allá del orgasmo.

Pienso que aquellos sumisos que no tienen claro estos puntos, están condenados al fracaso, a no ser que den con una mujer vainilla, que acepte alguna que otra de sus fantasias. Los que tienen la suerte de dar con una verdadera Ama, que sepa corregir al sumiso, y sean capaces de entender y profundizar en lo que es la verdadera sumisión, renunciaran a sus erróneas ideas, para empezar un nuevo camino de la mano de la Ama. No es un camino fácil. Es un camino en el que se aprenderá otro tipo de placeres, como el placer que sentimos los sumisos al contribuir a la felicidad y bienestar de la Ama a la que se sirve; o el placer a sentirse propiedad u objeto "valorado" por la Ama, por su utilidad y entrega. Cada premio recibido, no solo es un acto placentero para satisfacer una u otra cosa, sino que lleva ligado en él, una connotación de reconocimiento, que únicamente aquella persona que nos posee puede ofrecernos, y que supera con creces el placer físico que el premio en sí otorga.

El castigo a su vez, debe valorarse como una manera de corregir actitudes o acciones no deseadas por la Ama. Por eso, un castigo jamas puede ser algo placentero, sino algo doloroso, que nos ayude a no caer de nuevo en el mismo error. Al recibir el castigo, no solo se sufrirá físicamente por ello, sino que la connotación negativa que ello conlleva, de decepción por parte de la Ama, será la mejor de las motivaciones para no repetirlo. Por que una cosa está clara: el autentico sumiso, solo es feliz cuando la Ama es feliz. Tanto es así, que incluso será mas exigente consigo mismo para no repetir los errores.

Es fácil deducir por tanto, que los placeres que un verdadero sumiso experimentará con su entrega y dedicación, rayan la espiritualidad. Aquellos placeres físicos que la Ama decida otorgar, pasaran a un segundo plano, puesto que lo verdaderamente importante, es la felicidad de la Ama.

jueves, 6 de septiembre de 2007

Dolce and Gabbana





lunes, 3 de septiembre de 2007

INFORME DE CASTIDAD - SEGUNDA SEMANA


El deseo es mucho mayor. Empiezo a tener erecciones y no solo las nocturnas, sino en algún momento del día, en especial cuando pienso en Usted. Un ejemplo sería, cuando recibo un correo Suyo. Noto cambios físicos. Mis testículos están ligeramente hinchados, y surgen las primeras molestias hacia el final de la semana. Son molestias leves, como pinchazos, dolor profundo pero muy suave, algo de dolor en el bajo vientre (imagino que será la próstata), y dolor en las conducciones, sobre todo en la micción. Pero todo de manera muy suave.

Mi deseo me hace fijarme en las mujeres, aunque procuro controlarlo. Los pensamientos que me vienen a la cabeza, los enfoco hacia Usted, y a través de mi sumisión en Usted. Evito en todo lo posible no tener pensamientos eróticos, aunque no es nada fácil, pues se cuelan de manera seguida en mi mente, y por mucho que intento desterrarlos, vuelven al cabo de pocos minutos.

Cada vez es mas dificil vivir la castidad. Mi esperanza sigue siendo que Usted disfrute con mi sacrificio cada dia.